Los Ovitz, era una familia de rumanos de origen judío. El padre, Shipmson Eizik Ovitz,era un artista rabino enano, cuyo fruto de sus 2 matrimonios, nacieron 10 hijos, 7 de ellos enanos, afectados con displasia.
Dada la precariedad del momento, decidieron fundar su propio grupo para ganarse la vida, «La Lilliput Troupe«, cantaban y utilizaban instrumentos pequeños, acordes a su tamaño. Viajaron por Rumanía, Hungría y Checoslovaquia en los años 1930 a 1940, cosechando grandes éxitos.
En 1942, a pesar de la inestable situación de la Europa central, por la marcha del ejército nazi, los Ovitz, lograron continuar su gira ocultando su identidad judía. Pero el 15 de Mayo de 1944, los doce miembros de la familia fueron detenidos y deportados al temible campo de Auschwitz.
Una vez en el campamento, atrajeron la atención del médico aleman, Josef Mengele, conocido en el campamento como el «angel de la muerte«. Separó la familia del resto de los reclusos, trasladando a los Ovitz, a su particular zoo humano.
Fueron sometidos a todo tipo de experimentos, extracción de liquido de la columna vertebral, dientes, pruebas ginecológicas, y un sin fin de torturas y aberraciones, a manos del carnicero de Josef Mengele. Incluso se les obligó a desnudarse ante altos cargos nazis, además de rodar un corto para la diversión del dictador.
Un total de 7 meses de implacables experimentos sufrieron, hasta que Auschwitz fue liberado el 27 de Enero de 1945.
La familia fue rescatada por las tropas soviéticas de lo que probablemente hubiera sido una muerte segura. Quizás por su corta estatura o quizás por sus dotes de interpretación, lo que está claro, que aun sufriendo lo indecible, tuvieron mucha suerte dada la tremenda reputación de sanguinario que era otorgada a Josef Mengele. Un lista interminable de experimentos y asesinatos, casi 60 victimas diarias. Un doctor muerte que jamás fue juzgado.
Durante los siguientes cuatro años, la familia diambuló por las ruinas de la Europa central y oriental, hasta que en 1949 emigraron a Israel.El último enano adulto sobreviviente de la familia, Perla Ovitz, murió en 2001.
Más información en Wordandl
y en Wikipedia
Más fotos en memorial de Sarah Ovitz
Vídeo estremecedor programa Cuarto milenio sobre Josef Mengele
Y no menos dramático el vídeo en español de la familia Ovitz:
Espero que la raza humana haya tomado buena nota de lo ocurrido en ese terrible lugar para que nunca vuelva a ocurrir.
Que dura fue aquella época amigo, solo de pensarlo se me pone la piel de gallina.
Saludos Cordiales y ahora veo el vídeo.
Atroz. Parece que todo ese periodo haya sido una pesadilla insoportable. Pero ha sido real.
Gracias por la información, Josete.
Cuántas historias terribles hay detrás de cada una de las víctimas de cualquier genocidio…
Un besito.
Cada vez que leo información como esta, siento una enorme vergüenza sobre la raza humana y sobre nuestro comportamiento social.
Quizás esté un poco negativo esta mañana.
Tanto el vídeo como tu entrada me parecen extraordinarios. Un caso poco conocido, pero conmovedor y terrible.
Como es lógico me apunto tu blog, amigo Josete.
Un abrazo
Hace varios meses escuché en la radio una teoría bastante sorprendente sobre esta familia…
Esta teoría se basaba en la popularidad que los Ovitz obtuvieron en sus giras y espectáculos… Esto podría haber llegado a oidos de J.R.R Tolkien… y bueno, de ahí a lo que ya te puedes estar imaginando, sólo hay un paso…
Ovitz… Hobbits… en fin, teorias de la radio nocturna.
Un saludo 🙂
Realmente terrible, resulta increible lo que pueden llegar a ser y hacer algunas personas que se llaman humanos, no se puede comparar pero en nuestros dias, los enanos siguen siendo objeto de burla y una parte de la sociedad aún los ve como seres anormales, en mi ciudad Zaragoza se han prohibido todo tipo de espectáculos tipo los enanos toreros etc. y me parece muy bien.
Saludos.
Lo peor de todo es que el caso de estas personas lo hemos conocido y espero que sirva para que no vuelva a ocurrir, pero seguro que se habrán dado multitud de casos iguales o peores que jamás verán la luz. ¡Saludos!
Amigo Josete. Vuelves a poner el dedo en la llaga. Extremecedor relato el que nos cuentas, que nos demuestra la barbaridad del género humano.Espero que algún día podamos aprender de nuestros errores.
saludos
Sobrecogedor. Afortunadamente como cuenta la historia pudieron sobrevivir y encontrar su hogar, como otros muchos, en Israel.
Una gran historia magníficamente narrada.
Que atrocidad amigo.. me has puesto los pelos de punta…
Un saludo y feliz semana…
Durisima la experiencia que tendrian que pasar, realmente sobrecogedor.
Un abrazo amigo.
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No se pueden cerrar los ojos a las atrocidades, a las barbaries cometidas por nuestra raza, pero de verdad, me resulta tan duro, tan deleznable…
Un saudiño
Josete me encanta enterarme de este tipo de cosas y el post me ha encantado, pero a la vez siento grima por aquella familia entre millones más que tuvo que sufrir de todo.
Saludos.
Bello día amigo…pase a saludarte… un saludo
Mia es la venganza dice el Señor…quien desde los cielos juzgara a toda esta gente que hizo daño a tantos inocentes, bienaventurados los que lloran porque ellos seran consolados, cada persona que sufrio estas atrocidades sera recompensada.
ay dios, que pena con los enanitos, ellos son seres humanos valiosos como cualquier otro. ojala esto nunca se repita.
Hitler en el infierno.
Acabo de llegar a tu blog buscando información sobre esta increíble historia de la familia Ovitz. Te dejo la versión completa del vídeo, porque creo que merecen escucharse las estremecedoras últimas palabras de la entrevista a esta miembro de la familia.
Un saludo
Gracias amigo por tu aporte 😉