El metro de Estocolmo es bien conocido por su decoración de las estaciones, que ha sido llamado, la más larga galería de arte en el mundo entero. Varias de las estaciones (especialmente en la línea azul) se quedan con el fundamento expuesto, crudo y sin terminar, o como parte de la decoración. En la estación de Rissne, un muro informativo sobre la historia de las civilizaciones de la Tierra va a lo largo de ambos lados de la plataforma.
La arquitectura e ingeniería de estas estaciones del metro de Estocolmo se han integrado con el entorno de rocas donde han sido excavadas, de tal modo que forman parte de su exclusiva decoración.
Realmente una autentica belleza subterránea incluyendo uno de sus mayores problemas, los graffitis que le cuestan al gobierno de Estocolmo unos 50 millones de Coronas anuales en limpieza.
El fenómeno que anualmente crece ininterrumpidamente ha estimulado al gobierno a intentar detenerlo, otorgándole a la policía el derecho a efectuar registro corporal (cacheo) a personas que se sospechen ser portadoras de pintura spray. (Es el problema de cruzar dos artes).
Más fotos del Metro de Estocolmo
Vídeo:
El baúl de Josete 
Realmente sorprendente,con esté ejemplo se podrian unir tantas ciudades y lugares sin trasgredir geografícamente la naturaleza.felicidades.